.

.
"Practicar Hun Yuan Tai Chi para beneficio de la humanidad" (Gran Maestro Feng Zhi Qiang)

lunes

El enraizamiento


Es una postura en la que hemos alineado muy bien el cuerpo teniendo en cuenta la estructura corporal, el Eje Central, la alineación articular y una intención mental correcta, de esta manera conseguimos una buena estabilidad y equilibrio para realizar cualquier acción motriz, en definitiva, consiste en apoyar y distribuir correctamente el peso físico en los pies. Para conseguir el enraizamiento es necesario desarrollar una buena base, siendo éste un trabajo físico además de energético.

El Maestro Chen Fake se "hundía" en la Tierra
                Para conseguir el enraizamiento debemos desarrollar una intención firme y concentrada ya que si la mente está dispersa, la energía también lo estará  y no se produce dicho enraizamiento. La verticalidad del Eje Central distribuye equitativamente el peso en ambos pies, los cuales tienen nueve puntos de apoyo; el contacto estable con el suelo a través de estos puntos proporciona una postura sólida y logramos una sensación de estar enraizados al suelo.

El Chi desciende al punto Yong Quan (1R - Manantial Burbujeante)  y tanto el cuerpo como la mente presentan una calma excelente, de este modo conectamos con la Tierra y surge la unión con ella, creándose así el enraizamiento con el cual nos “agarramos” al suelo.

Si queremos conseguir una postura correcta necesitamos, entre otros aspectos,  flexionar las rodillas, situar la columna vertebral y el Eje Central correctamente y establecer el centro de gravedad del cuerpo en el Tan Tien; los pies se situarán paralelos y a una distancia igual que la de los hombros o caderas, esto favorece la apertura del punto Hui Yin (1VC – Reunión de los Yin) y permite tomar energía yin de la Tierra extendiéndose por todo el cuerpo. Más adelante, con la práctica, los pies se situarán paralelos y a una distancia que dobla el ancho de los hombros mientras que se flexionan las piernas lo máximo posible.

Las contracciones musculares que se originan durante la práctica de esta posición crean tensiones que estimulan la actividad celular ósea fortaleciendo las piernas y previniendo la osteoporosis.

Los nueve puntos del enraizamiento
                Aunque el enraizamiento está asociado a posturas estáticas de gran poder terapéutico (Wu Chi, Ma Pu), también potencia el trabajo energético mediante la relajación consciente y es la base para el desarrollo de técnicas de empuje de manos (Tui Shou) con una mayor fluidez. Es necesario ser flexible y ceder ante diferentes contextos o situaciones como pueden ser la práctica del Tai Chi o sencillamente caminar, lo cual nos servirá en la vida cotidiana para evitar lesiones y mantener el equilibrio. Estando enraizados es posible hacerlo con un solo pie, para ello se necesita concentrar la intención en el Tan Tien Medio y lograr la postura correcta estableciendo el  centro físico en el mismo lugar.

Por lo general la mayor parte del tiempo estamos sobrecargados de yang ya que somos como una antena que recibe energía del Cielo, en nuestra vida cotidiana actuamos pensando en lo que vamos a hacer y no en el presente, no es raro oír que alguien tiene “la cabeza en las nubes” cuando no está concentrado en el presente. Con el enraizamiento conseguiremos el equilibrio entre yin y yang, la conexión con el cielo (yan) y  la Tierra (yin). Así disminuimos el uso innecesario de energía a través de la postura correcta sin esfuerzo alguno, encontraremos seguridad, orientación y flexibilidad, además de desarrollar la paciencia y disfrutar mejor de nuestro entorno.

Otros beneficios del enraizamiento
- Relajación de tensiones.
- Toma de conciencia de alineaciones corporales erróneas. 
- Disminución del uso innecesario de fuerza.
- Sensibilización de nuestro cuerpo hacia una postura más sana.
- Desarrollar seguridad y flexibilidad.
- Equilibrio tomando la energía yin de la tierra y eliminando el exceso yang del cuerpo.
- Desarrollo de la sensibilidad en la práctica del Tuy Shou.
- Conectarnos con el presente para ser vivido “ahora”.

Para la práctica del Tai Chi Chuan lo primero que se ha de tener en cuenta es el enraizamiento. La base ha de ser sólida, firme. Se ha de sentir que a través de los pies, el peso se hunde dentro de la tierra. Sin enraizamiento no hay Tai Chi Chuan, sin fuertes cimientos, no podremos construir un buen edificio.

Para saber más: http://hunyuantaichi.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario